UNA INVESTIGACIÓN DE la Universidad de la Sabana revela que las prácticas de los docentes de preescolar no son las más indicadas para alfabetizar a los pequeños.
Ana María Chica Agudelo | Medellín | Publicado el 2 de enero de 2011
Justo antes de ir a la cama muchas mamás leen un cuento para sus hijos ¿pero saben acaso si el pequeño comprendió la historia?, ¿Por qué Caperucita escogió el camino largo?
Incluso desde antes de que los niños puedan leer por sus propios medios, padres y profesores tienen que desarrollar permanentemente la comprensión de lectura.
"No se lee con los ojos sino con el cerebro", advirtió Rosa Julia Guzmán, directora de la Maestría en Pedagogía de la Universidad de la Sabana e investigadora en el tema.
¿Cómo aprenden los educadores del nivel inicial a diseñar estrategias que faciliten la alfabetización inicial? es el nombre de la Investigación que durante dos años adelantó el grupo Educación y educadores, liderado por Guzmán.
La alfabetización inicial, según la investigadora, se relaciona con un saber básico como escribir palabras o formar con ellas una frase sencilla.
Lo que advierte, sin embargo, es que los niños están pasando al segundo ciclo sin haberse alfabetizado.
Entre los diferentes factores que influyen en el rendimiento escolar la educación de los docentes se lleva un lugar importante.
"Saber lo que uno va a enseñar es una condición necesaria pero no es suficiente, tiene que saber cómo enseñarlo", dijo.
Según el estudio, realizado con 25 docentes, éstos ignoran la pedagogía, desconocen la didáctica como disciplina y centran toda la atención de sus clases en actividades como colorear, hacer planas o dibujar.
Estas prácticas, dijo, derivan de no saber cómo es que se enseña a leer y a escribir.
Con base en el estudio, en el que se grabaron clases, Guzmán afirma que las actividades manuales como rasgar y pintar son comunes en todos los preescolares.
"Es grave porque pueden hacer muchas actividades con las que entretienen a los niños pero si no tienen una pedagogía y una didáctica que se las amarre pueden pasar delicioso pero no aprenden y como a los niños les gusta, las clases se llenan de eso".
"Algo por ser lúdico no garantiza automáticamente el aprendizaje", mencionó para referirse a los juegos y las actividades cotidianas.
Sobre la escritura, la investigadora recordó la importancia de que los niños estén escribiendo textos con sentido y no copiando ni haciendo planas. "No importa que no puedan escribir bien", recomendó.
Y sugirió, además, que el acercamiento con la lectura debe ser muy natural: que desde muy temprana edad los niños estén en contacto con diferentes tipos de textos.
"Uno lee para informarse, para entretenerse y ellos deben conocer que la lectura y la escritura cumplen diferentes funciones".
En la investigación se encontró que a los profesores los forman en disciplinas como Sociología, Sicología y Antropología pero muy poco en Pedagogía.
Los profesores saben mucha teoría, sin embargo, la Pedagogía no es un saber solamente teórico ni solamente práctico.
"Les dan mucha teoría pero les ofrecen muy pocas herramientas para aplicar lo que aprendieron y para reflexionar sobre el contexto en que enseñan y los efectos de sus prácticas".
Con la investigación, Guzmán pretende hacer un llamado a las entidades formadoras de docentes para que trabajen la Pedagogía como una disciplina esencial en la formación de un profesor.
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